Flights!
No sabía mucho de cervezas hasta que me mudé a San Diego, donde me introdujeron a los vuelos de cerveza:
¡De alguna manera, nunca había oído o visto de ellos!
Un vuelo son 4 o 5 pequeñas porciones de cerveza, típicamente en vasos de 4.5 a 5 onzas, usualmente servidas en un “paddle”. Al menos en San Diego, un vuelo cuesta tanto como una pinta de cerveza de barril, así que a menudo no hay que preocuparse de conseguir vuelos si quieres probar una variedad de cervezas. Cuando pides un vuelo, por supuesto puedes elegir qué 4 o 5 cervezas te gustaría tomar. A menudo selecciono cervezas similares -un conjunto de stouts y porterías- o un montón de IPA (y dobles), para tener la oportunidad de probar lo que distingue a marcas y subtipos específicos.
Cuando un amigo mío voló desde Nueva York (que tampoco había oído hablar nunca de vuelos), estaba entusiasmado con la idea de conseguir dos vuelos y compartir las 10 pruebas a ciegas entre sí. Pasó de decir, antes de llegar al bar, “Toda la cerveza me sabe igual, sólo puedo saber a oscuras o a claras”, a “Oh tío, no sabía que era capaz de probar tan pequeñas diferencias”
Así que los vuelos de cerveza son una forma efectiva pero casual y divertida de conseguir que tú o cualquiera aprecie los múltiples sabores de las cervezas.
Creo que intentar empezar con todos los ingredientes, procesos de elaboración de la cerveza, y la (vertiginosa) gama de terminologías para todos los gustos sutiles, podría ser como enseñar a alguien a conducir empezando con la diferencia entre par de torsión y caballos de fuerza - no pueden apreciar completamente el significado de las palabras hasta que hayan experimentado las sensaciones que describen. Al contrastar las cervezas una al lado de la otra, construimos un “vocabulario” de sabores interno, aún sin palabras, e.g “Esta cerveza tiene más de… esa cosa, como quiera que se llame, que ésta”, y _entonces aprendemos la terminología (e ingredientes y procesos) como medio de llenar esos vacíos en palabras para los sentidos que hemos experimentado. De lo contrario, estamos almacenando definiciones abstractas, que no retenemos muy bien.