¿Cómo categorizo a Orval?

Orval está en una categoría propia, no es una cerveza ámbar o rubia, tiene un sabor fresco, pero tampoco es una cerveza agria o de frutas. En general, cae dentro de la categoría de las belgas pálidas.

Orval tiene un proceso de elaboración muy tradicional y único que implica el uso de lúpulo seco, en el que grandes bolsas de lúpulo entrelazadas infunden la cerveza durante el período de maduración de tres semanas. El otro es el uso de la levadura Brettanomyces durante esta misma maduración, que es una levadura silvestre local. Se utilizan lúpulos de Hallertau, Styrian Goldings y Strisselspalt francés. La cerveza se madura a 15°C durante un mínimo de cuatro semanas en el lugar antes de ser distribuida.

Si se bebe justo después de ser embotellada tiene un sabor fresco “joven”. La cerveza puede ser conservada durante varios años ya que vuelve a fermentar una vez embotellada. Incluso la Orval de 35 años sigue siendo bebible, si se conserva a la temperatura adecuada. Después de aproximadamente 1 año de conservación el sabor de la cerveza cambia a una experiencia más suave, más dulce y más intensa en comparación con la joven.

Hay dos versiones de Orval, una es la normal que se puede comprar en las tiendas y luego hay también una especial Petite Orval, que sólo se puede beber en la abadía de Orval y sólo se produce para los monjes (no hay venta masiva). Su porcentaje de alcohol es mucho más bajo que el normal de Orval.

Orval se elabora principalmente con malta pálida (con algo de malta de caramelo), por lo que puede clasificarse razonablemente como una cerveza belga Pale Ale.